lunes, 15 de diciembre de 2008

¡¡Zapateósico!!

Y cómo esquiva el cabroneiro, qué reflejos los del mamónido este.

jueves, 11 de diciembre de 2008

Super Disco Fashion

¿Os acordais?
Peazo de anuncio: casposo, friki y divertido.


miércoles, 10 de diciembre de 2008

The Young Ones


La mejor sitcom de los 80, la cúspide del humor absurdo (con permiso del Monty Pithon's Flying Circus), el icono humorístico por antonomasia de la Gran Bretaña thatcheriana.
La serie, de tan sólo 12 episodios, trataba de las delirantes vivencias de cuatro estudiantes de la universidad Scumbag College que compartían piso en el Londres de la Gran Bretaña de Thatcher.
Ellos eran:

Neil - Hippy depresivo y con tendencias suicidas, era estudiante de Estudios por la Paz y solía ocuparse de cocinar lentejas y limpiar.






Rick - Estudiante de Sociología y Ciencias Domésticas, era anarquista, feminista, revolucionario, hipócrita, egocéntrico y fan de Cliff Richard (cuya canción, The Young Ones, daba título a la serie); solía referirse a sí mismo como "El Poeta del Pueblo". Odia a Neil.



Vyvyan - Punk obsesionado por la violencia, estudiante de Medicina; tiene un hamster como mascota llamado Brigada Antidisturbios. Odia a Rick.







Mike - Presume de ser un tío guay y ligón... aunque duerme con una muñeca hinchable; estudia Derecho y se le considera el líder del grupo.




Familia Balowski - Toda una familia interpretadas por el mismo actor; entre sus miembros podemos encontrar al dueño del piso, a un vampiro o a un maníaco homicida.





Además, la casa solía recibir la visita de algunos de los grupos más influyentes del momento: Madness, Motörhead, The Damned, Dexy's Midnitgh Runners, etc.

A cualquiera que no la haya visto dos consejos:
1º - ¡Ya tardas!
2º - El doblaje en castellano APESTA!!!

miércoles, 3 de diciembre de 2008

Etnias frikis 10: El coleccionista de lo cutre


Ya sea música casposa, ya sean objetos kitsch u horteradas, o films de serie Z, el coleccionista de lo cutre sufre una insana atracción hacia aquello de lo que los demás se ríen, se avergonzarían de tener o esconden cuando vienen visitas a casa. Esa fealdad, esa rareza, esa mente enferma que creó su objeto de admiración atraen al coleccionista de lo cutre como el fuego a las polillas: saben que no es normal, saben que puede suponer un suicidio social, pero es que es inevitable comprarlo. ¿Os habeis fijado con qué ojitos miran sus adquisiciones? ¿Os habeis percatado de cómo sonríen mordiéndose el labio inferior con los ojos bien abiertos cuando las admiran? Si eso no es amor sin condiciones no sé que puede serlo.
Visitad su sancta sanctorum de lo cutre: atrerraos ante sus imágenes religiosas iridiscentes y sus toros y bailaoras sobre el televisor; sentid vuestras tripas retorcerse cuando hace sonar sus discos de insoportables portadas y nauseabundas letras; desead que os trague el sofá cuando visionais con él una maratón de cine deleznable; miradle de reojo y ved cómo goza ante vuestras caras de desasosiego.
El coleccionista de lo cutre entiende que la genialidad está en ambos límites de la creación: en lo mejor y también en lo peor; entendedlo, él no reniega de la belleza, simplemente es capaz de amar también la aberración artística. Loor y gloria a tí, coleccionista de lo cutre, contigo cerca todos los frikis nos sentimos más "normales".

Campo de sueños, 1989



"Si lo construyes, ellos vendrán."